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Este es un articulo escrito Por Tomas Rios para www.sherdog.com.
Lo he leido y he pensado que podria ser interesante tras lo sucedido en el ultimo UFC 110.
A mi me ha gustado y espero que a vosotros tambien.
[i]Ver como Cain Velásquez detuvo a Antonio Rodrigo Nogueira en UFC 110 el sábado en el Acer Arena de Sidney, Australia, fue una experiencia sin igual. Esa noche no sólo nos regaló una prueba de que los mejores dias de Nogueira han quedado atrás, sino que además nos dejó ser testigos de los primeros pasos de Velásquez hacia el estrellato.
La movida con la que se pasa de ser bueno a ser grandioso se le escapa a casi todos, sin importar la profesión de la que estemos hablando. Esa es la razón por la que el momento de esa transición sigue siendo un paso tan transcendental para los pocos que lo logran hacer y para los que lo experimentan de segunda mano.
La breve historia de las MMA cuenta con pocos momentos de este calibre. Después de lo ocurrido en UFC 110, haremos un repaso por las peleas más sobresalientes que dieron nacimiento a las figuras más icónicas de las artes marciales mixtas.
1. Fedor Emelianenko vs. Heath Herring
Pride 23 "Championship Chaos 2" -- 24 de noviembre de 2002; Tokio
Digan lo que quieran de la inclinación de Herring por los ridiculos peinados, este hombre es más duro que un bistec Arctic-frozen de Costco. Antes de su pelea con el Texas Crazy Horse en noviembre de 2002, Emelianenko era sólo un gordinflón ruso con personalidad.
Después, Emelianenko literalmente lanzó a Herring al piso y comenzó a destruirlo. Lo más impresionante acerca de la matanza que prodigó este ruso fue lo que le hizo a Herring. Su dureza texana llegó a su punto culminante cuando le dio la espalda a Emelianenko en medio de la pelea.
Nadie sabe si el cerebro de Herring le estaba dando señales aleatorias a sus piernas o si simplemente estaba buscando la manera de escapar de la golpiza, lo que si fue evidente es que se lo vio perdido en el ring. Una piadosa detención médica en el primer round hizo que Herring no reciba más golpes por ese momento y le dio a Emelianenko el descanso que sus puños estaban necesitando.
Ese fue el último dia que todos pensaron que Emelianenko era otra cosa además de una refinada maquina de destrucción. Una legendaria carrera como campeón del peso pesado de Pride siguió poco tiempo después, y Emelianenko sigue siendo la imagen de la excelencia de la división al dia de hoy. En medio de todas las demostraciones vulgares de violencia que el Último Emperador nos ha dado desde entonces, no hay nada que se compare con esa noche de noviembre cuando dejó en claro al mundo que la destrucción tiene coraje y le encanta los sweaters a rayas.
2. Anderson Silva vs. Chris Leben
UFC Fight Night 5 -- 28 de junio de 2006; Las Vegas
La naturaleza multifacética de las MMA demanda ciertos sacrificios; Aprender tantos enfoques implica tener que conformarse con el hecho de que uno va a saber un poco de todo pero no va a ser experto en nada. Pero a Silva no le preocupa demasiado esta linea de pensamiento.
Como uno de los pocos verdaderos profesionales del golpe en este deporte, Silva entró en UFC cargando las vergonzosas derrotas ante Ryo Chonan y Daiju Takase en Pride. Leben aprovechó esas dificultades y dijo que iba a noquear a Silva y lo envió a la Tierra del Rising Sun. La frase "la retrospectiva es 20/20" parece estar hecha a medida para situaciones como esta.
La pelea se transmitió en vivo por Spike TV y le dio a Silva la mayor exposición que habia recibido hasta el momento de este lado del Pacifico. Los rumores que siguieron hicieron que el ganador recibiera la oportunidad de enfrentar al campeón del peso mediano de UFC, Rich Franklin. 49 segundos después de la campana que dio inicio al enfrentamiento, Leben quedó tendido sobre el lienzo después de apenas aterrizar un golpe y básicamente convertirse en la bolsa de golpes para que Silva practicara.
Ese nivel de excelencia se ha convertido en la marca registrada de Silva desde entonces, pero en ese momento dejó a todos con la boca abierta. Mientras que muchos fanáticos creian que Silva iba a superar a Leben, casi nadie esperó una victoria tan devastadora. Todos los que vieron la pelea en vivo, saben que la leyenda de Silva comenzó el segundo en el que aterrizó su primer golpe en el Octagon.
3. Kazushi Sakuraba vs. Royce Gracie/Igor Vovchanchyn
Pride "Grand Prix -- Finales 2000" -- 1 de mayo de 2000; Tokio
Sakuraba peleó durante 105 minutos delante de un público asombrado en el Tokyo Dome. Durante las finales del grand prix de peso abierto de Pride 2000, su noche arrancó ante Gracie, en una pelea que no iba a tener un tiempo pautado.
Podria decirse que fue la pelea más esperada de las MMA y duró seis rondas de 15 minutos. La pelea en si misma no ha conservado la fama con el paso del tiempo, pero ha sido una de las que más tensión ha producido a sus espectadores. Gracie peleó por su apellido, mientras que Sakuraba intentó convertirse en el primer hombre en superar al brasileño bajo sus propias reglas.
Paso más de una hora y media antes de que el rincón de Gracie lanzara la toalla y le diera al exhausto Sakuraba el pase a las semifinales del torneo. Esperando a la estrella japonesa estaba el peso pesado ucraniano, Igor Vovchanchyn, un hombre que no habia perdido en cerca de cinco años y peleó como si la vida dependiera de ganar de la manera más brutal posible.
Sakuraba, un glorificado peso mediano, peleó con Vovchanchyn durante 15 minutos hasta que su rincón se negó a permitir que su hombre siguiera durante otra tremenda ronda. Mark Coleman ganó el torneo, pero fue Sakuraba quien se convirtió en un personaje mitico. Todo lo que necesitó fueron 105 minutos que desafiaron a la compresión y biologia humana.
4. Randy Couture vs. Chuck Liddell
UFC 43 "Meltdown" -- 6 de junio de 2003; Las Vegas
El juego estaba llegando al final para Couture, quien estaba a punto de cumplir 40 años y venia de dos derrotas que lo hicieron renunciar al titulo en el peso pesado de UFC y también le dieron una chance para recuperarlo. Lo que complicó las cosas es que estaba haciendo una arriesgada movida hacia el peso pesado ligero para enfrentar a Liddell. Este último era un ser humano con un enojo infinito a punto de darle un golpe al mundo que lo dejaria en coma debido a que el campeón, Tito Ortiz, lo evitó sin verg
Lo he leido y he pensado que podria ser interesante tras lo sucedido en el ultimo UFC 110.
A mi me ha gustado y espero que a vosotros tambien.
[i]Ver como Cain Velásquez detuvo a Antonio Rodrigo Nogueira en UFC 110 el sábado en el Acer Arena de Sidney, Australia, fue una experiencia sin igual. Esa noche no sólo nos regaló una prueba de que los mejores dias de Nogueira han quedado atrás, sino que además nos dejó ser testigos de los primeros pasos de Velásquez hacia el estrellato.
La movida con la que se pasa de ser bueno a ser grandioso se le escapa a casi todos, sin importar la profesión de la que estemos hablando. Esa es la razón por la que el momento de esa transición sigue siendo un paso tan transcendental para los pocos que lo logran hacer y para los que lo experimentan de segunda mano.
La breve historia de las MMA cuenta con pocos momentos de este calibre. Después de lo ocurrido en UFC 110, haremos un repaso por las peleas más sobresalientes que dieron nacimiento a las figuras más icónicas de las artes marciales mixtas.
1. Fedor Emelianenko vs. Heath Herring
Pride 23 "Championship Chaos 2" -- 24 de noviembre de 2002; Tokio
Digan lo que quieran de la inclinación de Herring por los ridiculos peinados, este hombre es más duro que un bistec Arctic-frozen de Costco. Antes de su pelea con el Texas Crazy Horse en noviembre de 2002, Emelianenko era sólo un gordinflón ruso con personalidad.
Después, Emelianenko literalmente lanzó a Herring al piso y comenzó a destruirlo. Lo más impresionante acerca de la matanza que prodigó este ruso fue lo que le hizo a Herring. Su dureza texana llegó a su punto culminante cuando le dio la espalda a Emelianenko en medio de la pelea.
Nadie sabe si el cerebro de Herring le estaba dando señales aleatorias a sus piernas o si simplemente estaba buscando la manera de escapar de la golpiza, lo que si fue evidente es que se lo vio perdido en el ring. Una piadosa detención médica en el primer round hizo que Herring no reciba más golpes por ese momento y le dio a Emelianenko el descanso que sus puños estaban necesitando.
Ese fue el último dia que todos pensaron que Emelianenko era otra cosa además de una refinada maquina de destrucción. Una legendaria carrera como campeón del peso pesado de Pride siguió poco tiempo después, y Emelianenko sigue siendo la imagen de la excelencia de la división al dia de hoy. En medio de todas las demostraciones vulgares de violencia que el Último Emperador nos ha dado desde entonces, no hay nada que se compare con esa noche de noviembre cuando dejó en claro al mundo que la destrucción tiene coraje y le encanta los sweaters a rayas.
2. Anderson Silva vs. Chris Leben
UFC Fight Night 5 -- 28 de junio de 2006; Las Vegas
La naturaleza multifacética de las MMA demanda ciertos sacrificios; Aprender tantos enfoques implica tener que conformarse con el hecho de que uno va a saber un poco de todo pero no va a ser experto en nada. Pero a Silva no le preocupa demasiado esta linea de pensamiento.
Como uno de los pocos verdaderos profesionales del golpe en este deporte, Silva entró en UFC cargando las vergonzosas derrotas ante Ryo Chonan y Daiju Takase en Pride. Leben aprovechó esas dificultades y dijo que iba a noquear a Silva y lo envió a la Tierra del Rising Sun. La frase "la retrospectiva es 20/20" parece estar hecha a medida para situaciones como esta.
La pelea se transmitió en vivo por Spike TV y le dio a Silva la mayor exposición que habia recibido hasta el momento de este lado del Pacifico. Los rumores que siguieron hicieron que el ganador recibiera la oportunidad de enfrentar al campeón del peso mediano de UFC, Rich Franklin. 49 segundos después de la campana que dio inicio al enfrentamiento, Leben quedó tendido sobre el lienzo después de apenas aterrizar un golpe y básicamente convertirse en la bolsa de golpes para que Silva practicara.
Ese nivel de excelencia se ha convertido en la marca registrada de Silva desde entonces, pero en ese momento dejó a todos con la boca abierta. Mientras que muchos fanáticos creian que Silva iba a superar a Leben, casi nadie esperó una victoria tan devastadora. Todos los que vieron la pelea en vivo, saben que la leyenda de Silva comenzó el segundo en el que aterrizó su primer golpe en el Octagon.
3. Kazushi Sakuraba vs. Royce Gracie/Igor Vovchanchyn
Pride "Grand Prix -- Finales 2000" -- 1 de mayo de 2000; Tokio
Sakuraba peleó durante 105 minutos delante de un público asombrado en el Tokyo Dome. Durante las finales del grand prix de peso abierto de Pride 2000, su noche arrancó ante Gracie, en una pelea que no iba a tener un tiempo pautado.
Podria decirse que fue la pelea más esperada de las MMA y duró seis rondas de 15 minutos. La pelea en si misma no ha conservado la fama con el paso del tiempo, pero ha sido una de las que más tensión ha producido a sus espectadores. Gracie peleó por su apellido, mientras que Sakuraba intentó convertirse en el primer hombre en superar al brasileño bajo sus propias reglas.
Paso más de una hora y media antes de que el rincón de Gracie lanzara la toalla y le diera al exhausto Sakuraba el pase a las semifinales del torneo. Esperando a la estrella japonesa estaba el peso pesado ucraniano, Igor Vovchanchyn, un hombre que no habia perdido en cerca de cinco años y peleó como si la vida dependiera de ganar de la manera más brutal posible.
Sakuraba, un glorificado peso mediano, peleó con Vovchanchyn durante 15 minutos hasta que su rincón se negó a permitir que su hombre siguiera durante otra tremenda ronda. Mark Coleman ganó el torneo, pero fue Sakuraba quien se convirtió en un personaje mitico. Todo lo que necesitó fueron 105 minutos que desafiaron a la compresión y biologia humana.
4. Randy Couture vs. Chuck Liddell
UFC 43 "Meltdown" -- 6 de junio de 2003; Las Vegas
El juego estaba llegando al final para Couture, quien estaba a punto de cumplir 40 años y venia de dos derrotas que lo hicieron renunciar al titulo en el peso pesado de UFC y también le dieron una chance para recuperarlo. Lo que complicó las cosas es que estaba haciendo una arriesgada movida hacia el peso pesado ligero para enfrentar a Liddell. Este último era un ser humano con un enojo infinito a punto de darle un golpe al mundo que lo dejaria en coma debido a que el campeón, Tito Ortiz, lo evitó sin verg
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